Extraído de: http://www.sandieshaw.com/buddhaworld_2.php. Traducción: Susana Oyola - SGIPy
Revisión: Eduardo Ciancaglini – SGIAR. (Resumen de la orientación dada por la escritora Amy Schor Ferris, Responsable del Departamento Cultural de la ciudad de Nueva York, el 02/11/01)
Esta orientación de Danny Nagashima (Cantar daimoku para convertirse en una persona de ilimitada autoestima) es la mejor medicina. Cuando invoqué daimoku de esta forma, todo en mi vida cambió. Podemos analizar la propia situación todo lo que se quiera, pero se debe llegar al meollo del por qué uno no cree en la grandeza de su vida, enfrentar el problema desde la raíz y eliminarlo de su vida.
Debemos invocar daimoku para despertar nuestra propia grandiosidad, invocar para apreciar y valorar nuestra propia vida. Probablemente la respuesta es muy simple, pero como le damos demasiadas vueltas, se torna complicada y la solución termina pareciendo lejana. Cuando seguí la orientación de Danny, fue increíble lo que sentí: nuestra misión como budistas es ser felices, no dominar nuestros sufrimientos. Tenemos nuestro lado negativo y nuestro lado positivo. Hay una parte de nosotros que cree que podemos hacerlo, pero también hay una parte negativa que nos susurra: “¿A quién quieres engañar?" Y tenemos que luchar para no ceder a nuestra negatividad. No se trata de ser o no un escritor (o lo que sea), sino de convertirse en el hombre o la mujer que siempre quisimos ser, aquél que realmente valore su vida. ¡Ésta es una oportunidad transformar!
LOS OBSTÁCULOS QUE ENFRENTAMOS SON LA RESPUESTA A NUESTRAS ORACIONES
Esos sentimientos de duda, esos sentimientos de “como artista soy un fraude, un verdadero fracaso”, esos son precisamente los sentimientos que tengo que enfrentar. De la manera en que me siento conmigo mismo, ese sentimiento de detestarse a sí mismo, de no ser lo suficientemente bueno, de no contestar el teléfono porque podría ser el editor... son esos los sentimientos que tengo que enfrentar.
Tu talento no se cuestiona. Se trata de cómo te sientes acerca de ti mismo. Eso es el karma. Necesitas valorar tu propia vida, apreciarla. Y ello no tiene nada que ver con que alguien más te valore. Amy siguió a su corazón, a su naturaleza de Buda y, el efecto de ello, el beneficio de esto, fue MASIVO.
Necesitas seguir a tu corazón, verdaderamente atesorar tu vida. Cuando te sientes frente al Gohonzon e invoques daimoku, tienes que tener que mostrar la máxima reverencia para con tu vida. Porque tu vida merece esa clase de reverencia. Cuando Nichiren Daishonin inscribió el Dai-Gohonzon, ya estaba cantando Nam-Myoho-Renge-Kyo y, a causa de la grandeza de su sabiduría, fue capaz de inscribir el Dai-Gohonzon para toda la humanidad, para que todos podamos aliviar los sufrimientos.
Si invocas daimoku durante dos semanas para realmente ser una persona de ilimitada autoestima, y para verdaderamente apreciar tu vida, incluyendo tus defectos, logros, derrotas, pérdidas, victorias, lo que has creado, y verdadera y únicamente APRECIAR TU TALENTO como escritor (o lo que fuera), entonces TODO CAMBIARÁ.
Olvida todo el pasado “chatarra”, ya que éste sólo logrará hacerte sentir más impotente. Déjalo de lado. De ahora en adelante, realmente invoca daimoku para ser una persona de ilimitada autoestima. Realmente aprecia tu vida: todas las cosas acerca de ti que te hacen increíblemente único y maravilloso. Y recuerda: es toda esta materia prima -los sufrimientos- lo que te será útil para inspirar a otros. Eso es lo que necesitas para compartir tu experiencia, enfocarte en verdaderamente despertar tu propia grandeza. Ésta es la oportunidad que necesitabas atravesar para poder convertirte en un completo triunfador y para poder concretar tu sueño.
Si te enfocas en esto -realmente valorando tu vida ahora-, entonces todo se pondrá en perspectiva y de una manera mucho más grandiosa. Sentirás y conocerás tu propio valor y respeto. Esto es algo que nadie te puede dar: el universo está mostrándote aquello con lo que es menester que te conectes.
Cuando por primera vez invoques de esta manera, puede que mucha “chatarra” aflore en tu vida, un montón de negatividad, también sentimientos horribles pueden aflorar. Déjalos que pasen, como si fueran un resfriado, y transforma la oscuridad. Ve el lado iluminado de tu miedo. Siempre atraemos a nuestra vida lo que concuerda con nuestro estado de vida. Invoca para sentir una alegría indescriptible respecto a tu valor.
No ser capaz de escribir (o de lo que sea) era una manifestación de tu sentimiento de no ser lo suficientemente bueno. Si puedes darte a ti mismo un lugar donde puedas ver absolutamente la maravilla de tu propia vida, todo en ella se transformará por completo: tenemos que creer en nuestra propia naturaleza de Buda. Cuando miramos el Gohonzon debemos decirnos: “Voy a apreciar mi propia maravillosa vida.”
Es importante despertar a nuestra propia grandeza. Ahora es el momento de comenzar de nuevo. Tu vida es el Gohonzon. Cuando invocas a una deidad tu oración se convierte en pasiva. Pero nuestras propias vidas son la Ley Mística en sí mismas. Debes apreciar y valorar tu propia vida. El Gohonzon no está fuera tuyo. Cuando recibes un beneficio, fuiste tú quien lo creó. Debes despertar a tu grandeza.
Cree en la grandeza de tu propia vida. El Gohonzon es la manifestación de la vida iluminada de Nichiren Daishonin. Así como una hermosa pieza de arte encierra y revela una respuesta, o un gran libro de alguna forma toca tu vida, del mismo modo debemos extraer la naturaleza de Buda de nuestras propias vidas. Está precisamente allí: el Gohonzon es el perfecto vehículo para manifestar nuestro grandioso potencial.
Entonces, cuando exhibas tu Budeidad, manifiesta esa fortaleza, alegría, ese vibrante estado de vida. Y luego traslada eso al mundo circundante y cambia el medio ambiente. No estamos necesariamente invocando daimoku por la casa, el coche o la relación de pareja... Sino que estamos cantando daimoku para elevar nuestro estado de vida para atraer la felicidad.
Los resultados que vemos en nuestra vida son el reflejo de nuestro estado de vida. Cada día invocamos daimoku para manifestar nuestra naturaleza de Buda de manera consistente. Invoca para elevarte por sobre tu tendencia básica. Invoca con la convicción de que “¡MANIFESTO MI BUDEIDAD!”... y eso es lo que sucederá. Yo creo mi propia buena fortuna. Yo soy un Buda, y lo manifestaré cada día. Tengo que creer que merezco ilimitada felicidad. Un Buda es lo que realmente soy.
Cada día debo manifestar mi Budeidad y elevarme por sobre la creencia de que soy un simple mortal común que no merece la buena fortuna en su vida. Manifiesta el lado extraordinario que posees.
**Cree en la grandeza de tu propia vida. No reniegues de tu vida cuando estés frente al Gohonzon. No pidas, no grites y no regañes al Gohonzon. El Gohonzon es la herramienta que necesitamos para manifestar nuestra Budeidad. Tu vida es el Gohonzon. No calumnies tu vida. La duda es necesaria para probarte a ti mismo que eres un Buda. Concretarás cada uno de tus sueños, por TI.
Ya poseemos algo increíble: nuestra naturaleza de Buda, el Gohonzon. Pero no creemos en él. Tengo todo lo que necesito para salir de la pobreza, para transformar mi vida, pero si no creo que los ‘mil millones de dólares’ me pertenecen no voy a poder disfrutarlos. Es tiempo de cobrar el cheque. Confía en que el Gohonzon es el medio absoluto para transformar tu vida. “Confianza” es la palabra Clave.
Invoca daimoku con la determinación de que cada uno de tus más locos anhelos se concretarán más allá de tu más loca imaginación. Invoca para creer en tu Budeidad. Confía en la grandeza de tu vida.
En el gosho “Sobre el Logro de la Budeidad” Nichiren Daishonin establece el punto primordial: “Si desea liberarse de los sufrimientos del nacimiento y la muerte que ha venido soportando a lo largo de la eternidad y lograr la iluminación suprema en esta existencia, debe percibir la verdad mística que siempre ha existido dentro de su vida. Esta verdad es Myoho-renge-kyo. Por ende, invocar Myoho-renge-kyo le permitirá captar la verdad mística en su interior.” Esa verdad es que yo soy un Buda.
Usted es un Grandioso Buda*
Primero usted tiene que decidir que "un grandioso Buda está aquí sentado." Tomar esta decisión requiere de mucho valor. Por eso es que lo llamamos valentía en la fe. Usted tiene que reconocer desde el fondo de su corazón: "Soy verdaderamente un grandioso Buda." Ése es el significado de "Nam-myoho-renge-kyo es la mayor alegría dentro de las alegrías."
Después de esta reunión cuando vaya a su casa, por favor piense: "El grandioso Buda está caminando." El grandioso Buda está mirándose en un espejo, reflejando una vida y elogiando esa vida. Éste es el verdadero significado de hacer gongyo y de cantar daimoku.
(Fragmento del artículo: El Budismo de la Cultura del Océano por el Dr. Tetsugai Obo 23/4/2000
Tradujo: Susana Oyola.Revisón: Eduardo Ciancaglini)
Confía en el poder de tu daimoku. ¡Tu vida será INMENSA! Pon tu vida primero. Frente al Gohonzon, todo se trata de tu vida. Confía en que existe el cheque de mil millones de dólares que has tenido miedo de cobrar. Ten confianza en que “tengo TODO lo que necesito para mi felicidad... y está en mi Butsudan” = (armario donde está el Gohonzon).
1 comentario:
Gracias por inspirarnos. Este blog se lo referire a tantas personas que necesitan de este bello y real analisis.
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